En mi mundo paralelo todos los días son nuestros. En él desperté temprano para preparar el desayuno, porque elegiste el horario de mañana en el trabajo. En mi mundo paralelo te convenzo a besos de estar un poco más en cama. En ese mundo te puedo abrazar todos los días antes de salir de casa, hacemos el amor por las tardes, en ruso, en alemán, en español... porque podemos. En mi mundo paralelo bailamos salsa sin mayor excusa sin público, como el primer día que nos vimos. En ese mundo paralelo yo escribo versos interminables con tu belleza mientras tú cantas, yo te abrazo cuando estás cansada, tú me cuentas de Rusia, de casa, yo te escucho con la mirada en la perfección de tus ojos. En mi mundo paralelo buscamos a Peter Pan en Londres, paseamos de la mano por Paris, y recibimos el año nuevo en Sídney. En ese mundo me enseñas dónde vive tu corazón en Rusia y yo te llevo a la finca de café en México donde siempre quisiste hablar español. En mi mundo paralelo sin embargo se