Ir al contenido principal

Lo que hace la tele

Todos somos en última instancia la suma de nuestros temores, sin embargo… vivimos para enfrentarlos toda nuestra vida. Escuchando esto me preguntaba si alguna vez dejamos de ser lo que somos al enfrentarnos a nuestros miedos, o sólo cambiamos de miedos por cosas más profundas que jamás dejamos de sentir. Es entonces que enfrentarlos tiene que ser algo más allá que parte de nuestra identidad, porque entonces siempre seguiríamos siendo los mismos teniendo los mismos miedos.

Entonces enfrentados siempre a la condición de ser nosotros frente a lo que tenemos y lo que tememos, llegamos a ser algo distinto cada vez que luchamos contra eso que nos atemoriza, nos convertimos en una persona diferente si lo logramos, o nos engañamos y en el fondo conservamos siempre parte de lo que hemos sido, cubriendo el miedo con intrascendentes victorias sobre instantes difíciles.

Porque parece que los miedos son más profundos que los momentos que vivimos… pero siempre parece que tratamos de reducirlos a algo que podemos enfrentar para así tratar de lidiar con ellos. Es que enfrentarlos no es siempre la opción que tomamos, e incluso en algunos momentos nos esforzamos por posponer la situación que nos hace temer porque queremos dejar de vivir una parte tan humana como cualquier otra… Yo creo que somos mucho más que miedos, pero sin duda el miedo es una parte de lo que vivimos y con lo que vamos a morir.

Eso me pasa por no encontrar un buen libro para el verano.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Las noches magicas de… Hamburgo #hamburg #sunset #derspiegel #night

via Instagram

Introspecciones injustas

A veces pasan tantas cosas que parece que no pasa nada. Es que parece que estoy hecho para dejarlo todo con una facilidad impresionante. Las cosas llegan tan rápido como se van y no hay nada más viejo que dos o tres noches. Entonces revisando aún más adentro descubrí algo bastante preocupante. No tengo nada de toda la vida. No tengo nada que me haya acompañado más de 6 meses, parece entonces que la vida es desechable. Aún mucho más que lo material, tampoco tengo afectos que sean lo suficientemente duraderos para pasar de ser algo efímero. Viví la mitad de lo que llevo de esta vida “cambiando de aires”. De aquí para allá, conociendo a tanta gente que me asustaba. Pero llegó un punto en que me asusté tanto que dejó de importarme. Entonces todo comenzó a ir y venir, igual que yo. Fue entonces que dejó de tener caso creer que habría algo más duradero que lo necesario, que todo iba a terminar tarde o temprano, y todo ha pasado así. No guardo recuerdos, porque m...

Frontier

You are the expression of the limits just from your name.  Every detail of you is expressed in the closest way to perfection, but it has the advantage of being just simple to construct even more perfect being. There's no description for that. Your limits come from the sky, as the colour of your eyes, and the deepest part of the infinite is not brighter than your smile, the shadows are part of the contrast to understand the complementarities between light and dark. Every hair of yours is made of durable finest thread, golden and bright as forbidden treasures, longer and not so straight to be lost in its deepest aroma. Your beauty is as natural as the warming sun rays after a long winter, fresh and relieving, sweet all the time. The expression is candid, and the look is unstoppable, but everything conjugated is what makes you strong. Is not any part of you outside the frontier of perfection, but it's the combination of everything that turns you, human. The symmetry of your hips i...